Porque hay canciones que no solo se escuchan, se sienten, y Moenia tiene una colección completa de himnos que marcaron generaciones. Ir a verlos en vivo no es solo asistir a un concierto: es regresar al pasado sin dejar de moverte en el presente.
Debes ir porque nadie mezcla el synth pop, la nostalgia, la elegancia y el baile como ellos. Porque cuando suena “No puedo estar sin ti”, “Manto estelar” o “Estabas ahí”, algo pasa en el aire. Todos cantamos al unísono, todos cerramos los ojos, todos sentimos lo mismo.

Además, el show en vivo de Moenia es una experiencia sonora y visual impecable: luces, atmósfera envolvente y un repertorio que va del romance al desahogo, del corazón roto al deseo contenido. ¿Te gusta la música que te hace pensar, bailar y recordar? Entonces ya sabes dónde tienes que estar.
Y seamos honestos: ¿cuántas veces más vas a tener la oportunidad de escuchar a Moenia en un lugar tan íntimo como el Auditorio Nacional? No se trata solo de nostalgia, se trata de celebrar lo que sigue vivo, lo que sigue doliendo bonito, lo que sigue haciéndonos cantar con ganas.
Ve por ti. Ve por esa versión tuya que creció con estas canciones.
Porque Moenia no se escucha… se vive.