Este 7 de noviembre, BABYMETAL llega a la Ciudad de México para ofrecer un espectáculo que no es simplemente otro concierto: se trata de un evento que converge varios factores para hacer de la noche una experiencia imperdible.
Después de una década sin presentarse como cabeza de cartel en México, BABYMETAL vuelve con su propio show en solitario, lo cual ya es un motivo de celebración para sus fans en el país. Durante ese tiempo han crecido sus seguidores, se ha expandido su sonido, y ahora presentan su quinto álbum, Metal Forth, lo que añade una capa extra de novedad al evento.
Su-metal, Moa-metal y Momo-metal, acompañadas de la formidable Kami Band, están preparadas para ofrecer una producción que promete estar a la altura de sus grandes presentaciones internacionales.
La elección de la Arena CDMX para esta presentación le da un carácter propio al evento: una locación de gran capacidad, infraestructura profesional, escenario preparado para un show de altura. Esto indica que no será un show reducido o de club, sino una verdadera producción que abarcará sonido potente, iluminación espectacular, escenografía elaborada y momentos visuales diseñados para impactar.
La combinación de recinto + escala + banda que regresa con todo invita a verlo como una cita “de una sola vez”, algo que posiblemente no se repita de la misma manera.
El show está ligado a la gira mundial de Metal Forth, por lo que los asistentes pueden esperar dos cosas: un buen número de canciones nuevas, pero también un repaso de los clásicos que han forjado a la banda. Temas como “Gimme Chocolate!!”, “PA PA YA!!”, “Headbangeeeeerrrrr!!!!!” y “Road of Resistance” serán parte del set junto con cortes del nuevo álbum como “RATATA”, “Kon! Kon!”, “METAL!!” y demás colaboraciones que marcan su evolución sonora.
La mezcla perfecta para los fans de largo plazo que quieren revivir lo que amaron, y para quienes se acercan ahora y quieren ver qué tanto ha crecido la banda.
Ver a BABYMETAL en México significa compartir con otros fans una noche de energía colectiva, de “metal resistance” al estilo kawaii, de saltos, de canto, de coros intensos, de espectáculo visual y musical. La expectativa de que sea un momento especial —y con buena razón— hace que asistir no sea solo “ver una banda”, sino “ser parte” de algo significativo.
El hecho de que la venta de boletos comenzó con preventa especial para fans, que los precios abarcan distintos rangos (desde localidades básicas hasta zonas premium), y que se habilitó transporte oficial para facilitar la llegada, demuestra que el equipo detrás del evento espera una audiencia numerosa y preparada.

Si tienes interés de hacer cobertura gráfica o visual (fotos, video, etc.), identifica anticipadamente qué zona te ofrece mejor vista, y revisa qué tipo de restricciones hay respecto a cámaras o grabación.
Asegúrate de adquirir tus boletos con anticipación: las preventas ya se anunciaron y hay distintas zonas con diferencia de precios.
Considera tu ubicación: distintas zonas tienen distintos rangos, y uno podría querer estar cerca del escenario para captar mejor la experiencia.
Llega con tiempo al recinto, conoce la logística, considera transporte y aspectos de seguridad: un evento de esta magnitud convoca muchas personas.
Lleva la disposición de vivir la noche: gritar, saltar, participar. La banda lo merece y el público también.






